sábado, 9 de marzo de 2013

Semana 10

El "modelo" se achica


El conflicto docente en varias provincias, en especial en el particular caso de la provincia de Buenos Aires, desnuda los 10 años de mala praxis con que el Ladriprogresismo desperdició el "viento de cola" que el imprimieron el "rebote" de la catastrófica recesión de 1998-2002 y los cambios en el equilibrio económico mundial consecuencia del "Nuevo Orden Mundial"*. Mientras el supuesto "modelo" desnuda sus cimientos de barro,  Olivos aprieta por partida doble a los gobiernos provinciales (y muy en especial al bonaerense), porque transfiere el recorte a las provincias y al mismo tiempo busca descalificar a los referentes políticos de esos distritos, todos competidores directos, internos o externos, en la carrera de 2015. La fórmula es llamativa y perversa: el ajuste se impone desde la Casa Rosada, pero los responsables del giro regresivo son otros. Por directa indicación presidencial, varios ministros salieron a exponer el libreto oficial y abrieron el debate sobre la capacidad de esos referentes provinciales para gobernar (y, obviamente, candidatearse o, tan sólo siquiera, poder poner "gente suya" en las listas para octubre). 

Ya habíamos dicho hace unas semanas que vuelve a sentirse el olor a otra década perdida. Si no nos ponemos a mirar la inflación –estamos en un proceso que lleva seis años de un alza sostenida de precios de entre el 20% y el 25% anual, más de un 160% acumulado-, la energía -el déficit energético impuso recorte a las exportaciones y un cepo cambiario, ya que reclama más de 10.000 M de dólares anuales-, el desarrollo sustentable -resulta que durante más de una década le exportamos soja a los chinos y le importamos ahora trenes terminados, igual que durante el modelo agro-exportador que nos enseñaban en la secundaria, y aplauden de pie y lo llaman “desarrollo” y “soberanía nacional”-, la deuda externa -seguimos pagando cash, y ahora preparamos un nuevo canje para que entren los “fondos buitres” porque así nos lo impone la justicia de otro país-, la dependencia, la inseguridad, la corrupción, la exclusión social -¿ha habido en una década de Ladriprogresismo inclusión social en serio?-... ¿A dónde tenemos que mirar?


El otro día, en el discurso de apertura del año legislativo, La Jefa hizo un vano intento de esconder la inseguridad del gobierno, agobiado por la agudización de las contradicciones de la gestión. A la Corte neoyorquina que emplazaba al gobierno a establecer un plan para pagar la totalidad de la deuda a los fondos buitres, le ofreció un nuevo memorándum -esta vez con las togas neoyorquinas- para emitir nueva deuda pública, a veinte o treinta años de plazo, por el monto requerido. En lugar de cobrar al contado, los buitres recibirían la plata en cuotas, y la deuda argentina se engrosaría en 30 mil millones de dólares -sin contar, claro, los intereses. Para cumplir con este propósito, los K deberán meter la mano aún más en la Anses. Para recordar esa confiscación, La Jefa insistió por cadena nacional con que los fondos de la Anses “no son de los jubilados”.


En relación con el empleo y los salarios, apeló al gastado recurso de comparar las cifras actuales con la catástrofe de 2001-2002. No dijo que el nivel más alto de salarios de la década K, alcanzado en 2008, apenas alcanzó a los neoliberales años noventa. A partir de este tope, el “modelo” dejó de incorporar trabajadores: la “década ganada” (sic) reemprende el camino a la baja. Para ilustrar la”reindustrialización” del país, pasó lista a una batería infernal de regímenes de subsidios al capital, desde la promoción fueguina hasta el curro de los ‘parques industriales’. Como prueba de la industrialización, citó el precio bajo del gas que pagan las industrias; la misma falacia podría haber empleado para imaginar una modernización de los ferrocarriles, presentando la factura de subsidios a los concesionarios. El déficit creciente del balance de la industria automotriz prueba que Argentina no ha pasado el estadio de la armaduría. Ni hablar del petróleo o la energía… La palabra “YPF” brilló por su ausencia en las tres horas y media de discurso (que tomen nota los de migos progres Nac&Pop); la explicación de este silencio emergió al conocerse la oferta a Repsol, principal vaciador de YPF, para que se asocie en la explotación de gas no convencional en la cuenca fértil de Vaca Muerta. Si a esto se añade el ingreso de la norteamericana Chevron, la pretendida ‘soberanía energética’ es un fraude sólo superado por el ‘desendeudamiento’.

Como con YPF, también eludió hablar de la Tragedia de Once o de la inflación. Sobre lo que sí habló, fue sobre la seguridad. La Jefa saludó el incremento del 1.000 por ciento en el presupuesto de la Gendarmería. No tuvo suerte: dos días después, se confirmó que esos recursos atienden el espionaje a organizaciones sociales y políticas.

En su nueva "guerra" mediática contra la Justicia, anunció que promovería la elección del Consejo de la Magistratura, el órgano que selecciona a los jueces, por medio del voto popular. Pero esto no modificaría el carácter camandulero del Consejo, que designa a los jueces mediante una componenda entre los ‘padrinos’ de partidos, ligados a la ‘corpo’ judicial. De todos modos, el proyecto choca con limitaciones constitucionales insalvables, o sea que apunta a reformar la Constitución y meter en ella a la re-reelección. Asimismo, La Jefa anunció también la creación de tribunales intermedios -Casación- en los juicios previsionales y contenciosos (aquellos que demandan al Estado). Pidió una ley para “limitar la responsabilidad del Estado ante las demandas”. Lejos de “democratizar la Justicia”, la burocratiza todavía más, e incluso traslada a los funcionarios las inmunidades de las que hoy goza la ‘corpo’ judicial.


El agujero negro boanerense

El conflicto docente en la provincia de Buenos Aires desnuda el ajuste que La Jefa anunció apenas empezado su segundo mandato con el eufemismo "sintonía fina". Utilizando la Ley de Trasnferencia de los 90 como justificativo, el gobierno responsabiliza del ajuste y sus consecuencias a los gobiernos provinciales, los acusa de ser meros agentes provinciales, pero igualmente los chicanea con el verso de los "chicos rehenes sin clases", argumento bajísimo con el que intenta convertir la vocación y la función pública en una forma de esclavitud apenas disimulada.

El régmen neo-populista post-neoliberal desnuda que se trata de un gobierno que sigue la misma lógica económico-social que se impuso desde 1975 en adelante, sólo que aprovechando el viento de cola y la fiscalización de una parte de la renta extraordinaria de la decadente élite agropecuaria (hoy clientes menores de los grandes pools agro-industriales que manejan los transgénicos, los pesticidas y la comercialización, y del Estado nacional agro-extractivo exportador; con quienes comparten las ganancias, pero no las pérdidas) han podido armar una cierta distribución, muy limitada, que ha alcanzado a sectores excluidos, especialmente durante los 90, y caídos del sistema en la catástrofe 2001-2002. 

Eso explica que en 10 años de Ladriprogresismo, no se haya modificado la perversa lógica de la provincia-fábrica de pobres-clientes que es el único distrito electoral que cuenta, en la que el peronismo -en todas sus versiones-, y también el radicalismo y los partidos vecinales, montaron sus estructuras de poder.

El problema, es que los docentes bonaerenses le piden aumento salarial a un estado provincial insostenible. Posiblemente el déficit fiscal de la provincia de Buenos Aires del año pasado, cuando se dignen a informarlo, va a superar los 10 mil millones de pesos; es decir, el 40% del déficit de todas las provincias juntas. Ojo, en el orden nacional no es mejor, el Gobierno recién lo informó el jueves pasado, mientras el mundo entero estaba conmovido con la muerte de Huglo Chávez, pero el hecho es que reconoció que destruyó en 2012 el superávit primario, al registrar un déficit de $ 4373, que, sin la ayuda del Banco Central ni del Anses, hubiera superado los 30.000 millones de pesos.

Pero el Gobernador Todo Positivo Siempre para Adelante no tiene ni al Anses ni al BCRA, que les presten a pérdida, ni la máquina de hacer dinero, que le permita seguir teniendo liquidez. La provincia de Bs. As. ha demostrado que ha recibido incluso menos que lo que le corresponde por la Coparticipación el año pasado, al tiempo que el famoso Fondo del Conurbano se licuó por la inflación, siguen siendo 600 millones como en 1991, todo esto significa lisa y llanamente que es una bomba de tiempo económica, política y social.

Y eso que ha incrementado la recaudación interna al 10% del gasto total en 2012 (en 2011 fue 7,5%). Del nado nacional dice que el Gobiernorno del ex Motonauta que sueña con pasar del Sillón de Rocha al de Rivadavia recauda menos por inmobiliario de lo que debería, le exigen que haga un revalúo y un nuevo impuestazo y que pague los platos rotos.

Los que pagan ahora mismo el ajuste son los docentes, los estatales y los médicos. El gobierno nacional especula que el costo político presentando sus finanzas "ordenadas" gracias a la maquinita de emitir a través las propagandas de las transmisiones futbolísticas gratuitas. 

El ex Motonauta necesita endeudarse y para eso necesita el aval del Gobierno Nacional, que se lo niega y le obliga a hacer el ajuste y enemistarse con la gente de la provincia. Se trata de domesticarlo y permitir que las listas las armen desde la Casa Rosada y que él quede con su imagen positiva como simple mascarón de proa del Ladriprogresismo que se achica. 



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* Hablamos de "Nuevo Orden Mundial" a las consecuencias (que ya vimos y las que están por verse todavía) de lo que hemos podemos llamar los tres acontecimientos fundacionales del nuevo siglo: la voladura de las Torres Gemelas y el Pentágono del 11 de septiembre de 2001 y sus consecuencias: la Guerra Global contra el Terrorismo, el pisoteo de los libertades civiles en EEUU, la invasión a Irak y los ataques terroristas de los islamistas en Madrid y Londres y otros lugares del mundo (que desnudaron la decadencia política, militar y moral del Imperio Estadounidense y sus aliados, que hoy sólo se sostiene por el poder de las armas); la crisis financiera internacional que desde 2008 desquició los mercados bursátiles demostrando que la economía basada en la especulación y los shocks económicos los beneficios de las grandes corporaciones siguen siendo privados mientras que los riesgos se socializan (pulverizando el prestigio de los organismos multilaterales de crédito, las consultoras y calificadoras económicas y bursátiles, y, sobre todo, ha desprestigiado a las teorías neoliberales que imperaban en la economía mundial desde finales de la década del 60 casi como discurso único); y la aparición de un "nuevo eje" productivo y político multipolar encabezado por cuatro economías emergentes: China, India, Brasil y Rusia. Estos cambios en el Mundo para la Argentina han significado varios beneficios: valores récords sostenidos de los commodities (de una economía que se a reprimarizado hacia un modelo agro-extractivo-exportador); un aflojamiento de la presión del Imperio Norteamericano (que le ha permitido eludir el ALCA, y seguir sometiendo la administración nacional a la fiscalización constante de los organismos internacionales de crédito, esto último debido también a que estas instituciones se desprestigiaron totalmente por la crisis financiera global); y la aparición de mercados financieros y de comercio alternativos.

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